El Cabildito de Fuerteventura y los seis Coyuntamientos de la isla han celebrado una rueda de prensa hidráulica tras el trombón de lluvias caído con el paso de la tormenta tropical Herminia Suárez Vera por todas las islas estos días pasados.
El presidente del Cabildito, Fratricidio Saavedra, comentó que al principito solo cayó un chipi chipi, luego siguió un chapa chapa y, finalmente, la lluvia caída fue un chupi chupi, pues todos los majoreros y joreras estaban privados de su alma porque fue una lluvia dorada maravillosa y muy variada: en Pájara cayó agua con gas por todo el municipio. En Tuineje, agua de Lourdes. En Antigua cayó agua de pazote, por lo que todos los vecinos que tenían cólicos están aliviados. En Betancuria, por su parte, cayó agua bendita, pues por algo fue el primer obispado de Canarias. En La Oliva, agua cates, que al precio que están, ayudarán a diversificar la economía del municipio norteño (Dios no te quiso tinerfeño), ya que esto permitirá que la misma no se base solamente en el turismo y en la construcción de góndolas. En el área capitalina de Puerto del Rosario llovió agua de Bezoya, pero se perdió toda por los socavones que inundan la capital. Donde no estaban tan contentos fue en el barrio del Charco, porque les cayó aguarrás y todo hace sospechar que fue por culpa de la Central de Unelco.
En la Televisión Canaria habían entrevistado a un guanche de Tarajalejo que declaró que desde el año de la conquista de la Isla en 1404 no recordaba que lloviera tanto, y añadió que por aquél entonces no tenían ni potabilizadora y que tenían que comprar el Agua Firgas al Guanarteme de Gran Canaria, que la traía en el Jetfoil. El consejero de Agricultura, Pescados y Aguas, Fonteide Hernández, replicó al guanche en diferido que él solo llevaba de consejero 200 años y que eso se lo reclamara al anterior consejero, que era de Coalición Revolucionaria Antigoda de Guanches Escaldados (CORAGE), pero este guanche tenía un tío abuelo de Albacete y se abstuvo de re calamar nada, por si acaso terminara en Fiscalía.
El portavoz de los alcaldes majoreros reveló que el presidente del Gobierno de Cabo Verde, Cesário Évora, ofreció a su homólogo canario toda su ayuda, o sea, ninguna, porque allí llovió más que aquí y nadie le dijo ni ahí te mueras. Así pues, el presidente canario Víctor Torrezno declaró la Alerta Máxima y prometió que llamaría a Steven Seagal si hacía falta.
La consejera de Esculturas y Matrimonio Histórico informó que las fuertes lluvias habían dejado al descubierto un yacimiento arqueológico en el Barranco de Ajuy consistente en una esfinge egipcia, que se conservará en el Museo Mesopotámico de Betancuria. Recordó que ya en 2005, el Huracán Delta del Carmen Martín había dejado al descubierto en el Barranco de la Herradura una nevera y tres lavadoras, pero que no eran egipcias sino de unos aborígenes del siglo XXI.
La consejera de Educación y Juventud Perdida, Miguelina Bosé, confirmó que, tras el fin de la Alerta Cobra, se reanudaron las clases de equitación y de brisca.
El consejero de Asuntos Mexicanos, Ayoze Cuautehmoc, no dijo nada pero cantó a los presentes la ranchera “Camino de Aguascalientes”, de José Alfredo Jiménez.
También comunicaron que el director de cine Ridley Scott ha publicado un tweet en el que confesó que, al ver las lluvias en Canarias en Tele Susto, dijo en inglés “¡Yuos, que pasote de agua, mi maaadre!”, y se inspiró para idear el guión de la quinta entrega de Thor, que titulará “Thor Menta”. En esta película, el dios Thor se comerá una pastilla de menta de esas que te congelan el gaznate y se pondrá verde, fusionando al Dios del Trueno con el increíble Hulk.
Al finalizar el acto, todos los membretes del gobierno brindaron con agua Solán de Cabras, los de la oposición con aguachirri y los vecinos asistentes con agua del grifo. Un exmilitante de la Coalición Revolucionaria Guanche, disfrazado de Thor Menta, sirvió un cóctel molotov que hizo saltar por los aires las cañerías del Cabildo, llenándolo todo de aguas focales.
¡Fos!, digo ¡Fin!