Coalición Canaria Fuerteventura ha mostrado su rechazo al uso del suelo rústico para la construcción de un parque de viviendas por considerarlo una “solución improvisada” para resolver el problema habitacional en las Islas, sin tener en cuenta el planeamiento general de cada municipio o la cohesión territorial. De este modo, el secretario insular de Coalición Canaria en Fuerteventura, Mario Cabrera, ha señalado que desde el partido rechazan esta solución repentina y subraya que “el suelo rústico no puede convertirse en un ‘cajón de sastre’”.
Para Cabrera, las políticas y planes de vivienda no se deben desarrollar sin tener en cuenta los planeamientos municipales y el modelo territorial. Según ha explicado el secretario insular “cada plan general de ordenación fija el suelo necesario para dar respuesta a las diferentes demandas vecinales para obtener vivienda tanto en los pueblos como en las zonas urbanas”.
Cabrera señaló que Fuerteventura cuenta con “el suelo urbano disponible y urbanizable suficiente para edificar la vivienda que el Gobierno de Canarias demanda, sin acudir al suelo rústico”. Mario Cabrera ha explicado que en la isla existe suelo urbanizable residencial potencialmente edificable a medio plazo, pero también lo hay a corto plazo si se tiene en cuenta el suelo ya en proceso de urbanización parcialmente ejecutado con edificaciones residenciales próximas a su culminación o en disposición inmediata de utilización, el suelo urbano vacante y las viviendas vacías, actualmente secuestrados por falta de apoyo a la inversión o de garantías para los pequeños propietarios.
Asimismo, el secretario insular de CC-AM recalcó que la solución para acabar con los problemas habitacionales en las islas “no es coger suelo rústico para crear vivienda, sino crear y trabajar en políticas de vivienda eficaces”. Cabrera ha continuado argumentando que las medidas deben ser coherentes “con el modelo de isla que queremos para Fuerteventura”.
“Pensar que una medida destinada a satisfacer la necesidad puntual de la isla de La Palma, a recuperar las viviendas y construcciones sepultadas por el volcán, puede convertirse en una solución para la demanda de vivienda en el resto del territorio canario, denota un grave desconocimiento de cada realidad insular”, destacó Cabrera.
Además, la utilización de suelo rústico para la creación de parques de vivienda ad hoc puede generar conflictos con la movilidad por su lejanía a los núcleos poblacionales, con el acceso a los servicios básicos y una merma para la calidad de vida de la ciudadanía. “Hay que tener en cuenta que cada isla requiere de una ordenación específica y particular a razón del territorio, no solo desde la perspectiva física sino también social”, añadió el secretario insular.
“Desde CC-AM consideramos que el Gobierno debe centrar el esfuerzo inmediato en poner a disposición suelos ya transformados y conectados a los núcleos urbanos, así como promover políticas que den garantías a los pequeños propietarios para poner en el mercado las viviendas vacías, así como hacer atractivo el alquiler residencial frente al turístico, además de facilitar la gestión de los suelos en ejecución, agilizando la culminación de urbanizaciones a medio acabar”, concluyó Cabrera.