comunicado del gobierno de canarias
El presidente de Canarias participa, en Arucas, en las jornadas conmemorativas del 45 aniversario de las corporaciones municipales democráticas
El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha planteado esta tarde, en Arucas, la necesidad de revisar las competencias municipales así como su financiación, “para garantizar los servicios públicos, teniendo en cuenta que los Ayuntamientos son la primera línea de atención de los ciudadanos y a quienes acuden cuando tienen problemas o asuntos que resolver”.
Clavijo, que hizo estas manifestaciones en una conferencia celebrada en el ayuntamiento de Arucas para conmemorar los 45 años de ayuntamientos democráticos, puntualizó que este debate debe hacerse en el marco de Estado, “y no creo que este sea un buen momento para abordarlo con la polarización política que padecemos y las inminentes citas electorales autonómicas y también europeas”, lamentó.
En cualquier caso, estudiar estos asuntos “nos hace profundizar sobre qué estado de bienestar deseamos, qué servicios públicos estamos preparados para ofrecer gratuitamente y qué deberes son exigibles a la sociedad”.
Todo ello con la idea fuerza de que el municipalismo tiene que estar mucho más definido, “aunque pareciera que ese deseo ya se recogía en la Ley de Bases de Régimen Local de 1985, en la que ya se mencionaba que la Administración local estaba tan necesitada de adaptación a la nueva realidad y estaba expuesta a sufrir los males que puedan derivarse de una abusiva limitación de su capacidad de actuación en los asuntos”, destacó.
Clavijo insistió en que no es una cuestión de voluntad, “si los Ayuntamientos no tienen las competencias, no tienen capacidad ni los recursos económicos y humanos para hacer frente a las demandas y, por ello, en situación de urgencia o emergencia, se sienten desbordados e impotentes para dar la respuesta a los ciudadanos, para ejercer el servicio público para el que se comprometieron en su día sus responsables políticos”.
Clavijo explicó que su experiencia como concejal y alcalde de San Cristóbal de La Laguna le ha ayudado “a la hora de legislar y buscar mecanismos que sean efectivos para resolver los problemas cotidianos”.
En ese sentido, se declaró como “municipalista convencido, porque desde esa perspectiva conocemos mejor que nadie que la gente necesita respuestas las 24 horas del día los 365 del año, y desde esta concepción afronto la presidencia de Canarias, sin perder de vista las necesidades de los ayuntamientos que en definitiva son las de los canarios y canarias”.
Fruto de esa filosofía fue el Fondo de Desarrollo de Canarias FDCAn, “que impulsamos en la Legislatura 2015-2019 aportando planificación a la diversidad y uniendo esfuerzos para diseñar juntos el futuro de otra manera”, explicó.
Ha sido el caso del reciente Decreto Ley de Medidas urgentes en materia de vivienda, “para el que hemos trabajado con los Ayuntamientos para buscar nuevas fórmulas, nuevas políticas que desatasquen una situación que no mejora a pesar de los años, a pesar de los cambios políticos. A esta tarea también estamos incorporando a los Cabildos porque hay que unir fuerzas y aplicar nuevas recetas para obtener resultados diferentes”, señaló.
Con este Decreto, y la futura Ley de Vivienda vacacional y el trabajo conjunto que se realice con los cabildos y los distintos ayuntamientos, “podremos ir descomprimiendo el mercado inmobiliario a lo largo de los próximos meses y ofrecer mayores posibilidades a las familias”.
Al reto de la Vivienda, el presidente canario añadió los desafíos del cambio climático y el reto demográfico. Sobre este último ha convocado, por primera vez, a la Conferencia de Presidentes, el 30 de abril en el Parlamento de Canarias, “para abordar de manera transversal un problema que nos afecta a todos pero de manera desigual”.
En Canarias existen zonas muy pobladas “pero el despoblamiento también está afectando a nuestros pueblos”, advirtió Clavijo, que recordó que “ hemos instado a la Federación Canaria de Municipios a trabajar paralelamente para definir la hoja de ruta que frene la despoblación de las zonas rurales de las islas, concretamente con los 46 municipios canarios de menos de 10.000 habitantes”.
“Las zonas rurales deben ser nuestro mayor orgullo, son las que nos aportan identidad, paisaje y donde se desarrolla el sector primario, pero hay que dotarlas de oportunidades para que las familias puedan desarrollar un proyecto de vida en ellas”, concluyó.