A partir de las 10 de la mañana y hasta las 12 del mediodía, los teléfonos móviles de la Isla han ido recibiendo progresivamente un mensaje de alerta, acompañado de un pitido y una vibración. No se trataba de una emergencia real, sino de un simulacro para medir la capacidad de aviso ante una alerta real.
Se trata de un simulacro puesto en marcha por la Consejería de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias, que dirige Manuel Miranda. Esta experiencia cuenta, además, con la colaboración del Cabildo de Fuerteventura, así como otras administraciones, como el Ayuntamiento de Puerto del Rosario.
Este sistema de aviso de emergencia se hace en coordinación con todas las compañías telefónicas, que forman automáticamente parte del sistema, y tienen alcance insular, si bien existen zonas de sombras que aún quedan por mejorar debido a la falta de cobertura por parte de los repetidores de señal.
El sistema de aviso de emergencia empleado hoy en Fuerteventura es similar al que se utiliza en otros países, entre ellos EEUU.