OPINIÓN. «La clase política se ha olvidado de los más jóvenes», por José Vicente Calero

Tengo la impresión de que las administraciones públicas se han olvidado de los más jóvenes, concretamente de los menores de edad, no siendo una prioridad para los grupos de gobierno en la actualidad.

Me pregunto a qué se debe esta cuestión. Desde mi perspectiva algunos representantes públicos usan más de la cuenta la calculadora electoral en la toma de decisiones. Y, por desgracia, este colectivo, al no tener derecho al voto, siempre se deja de lado. Esta es la imagen que yo percibo con mucha tristeza, pues los jóvenes no solo son el futuro sino el presente, y por ello las administraciones deben tener un papel protagonista a la hora de ejecutar acciones destinadas a los jóvenes.

En la isla de Fuerteventura podemos observar esta situación en todos los municipios. Los parques infantiles, por ejemplo, no cuentan muchos de ellos con un mantenimiento adecuado. En algunos de ellos se puede apreciar una falta de limpieza importante, obligando a los padres a tener que acudir con sus hijos a otros parques o, incluso, teniendo que limpiar ellos mismos los columpios para que los más pequeños puedan jugar. También escasean los parques con zonas de sombra, obligando a los más pequeños a acudir a ellos solo en una determinada hora. Otro ejemplo de ese abandono se pudo apreciar la legislatura pasada en el municipio de Puerto del Rosario con el cierre de los parques infantiles, donde los pequeños de la casa tenían que acudir a otros municipios de la Isla para disfrutar de ese tiempo de ocio. Igualmente, observamos falta de instalaciones deportivas en la Isla y las que tenemos en muchas ocasiones se encuentran abandonas. Y, como decíamos, esas políticas juveniles destinadas a la realización de actividades culturales y acciones destinadas a los jóvenes son escasas. No podemos seguir dejando a un lado a los más jóvenes. Necesitamos un cambio de enfoque en la gestión pública y para ello debemos invertir en actividades culturales, deportivas y educativas donde se fomente el desarrollo y la participación de niños y adolescentes.

Es la hora de que en las agendas políticas aparezcan los más pequeños y se les escuche, que exista un compromiso real de los grupos de gobiernos de la Isla para trabajar por ellos con políticas a largo plazo, pues recuerden que olvidarnos de los más jóvenes hoy, es olvidarnos del futuro.