La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, a través de la Dirección General de Salud Pública, emite avisos de riesgo para la salud por previsión de Altas Temperaturas en los próximos días. Para la asignación de niveles de riesgo se ha establecido un algoritmo que incluye las temperaturas máximas previstas, temperaturas umbrales y factores de riesgo.
GRAN CANARIA
Aviso naranja, nivel de riesgo 2, del 10 al 14 de abril en Santa Lucía de Tirajana y del 10 al 12 de abril en San Bartolomé de Tirajana.
Aviso amarillo, nivel de riego 1, del 11 al 13 de abril en Mogán y La Aldea de San Nicolás.
FUERTEVENTURA
Aviso amarillo, nivel de riesgo 1, del 11 al 13 de abril en Tuineje, Antigua y Pájara.
LANZAROTE
Aviso amarillo, nivel de riesgo 1, del 11 al 13 de abril en San Bartolomé.
La Dirección General de Salud Pública tiene establecido un sistema de vigilancia epidemiológica del impacto de las altas temperaturas sobre la salud de la población, coordinado con los centros asistenciales y de urgencias de Canarias, así como el aviso a dichos centros y a los ayuntamientos afectados de la previsión de situaciones de alerta. Asimismo, Salud Pública proporciona información a los medios de comunicación destinada a facilitar consejos útiles y medidas prácticas para prevenir los efectos de la exposición a temperaturas elevadas.
Umbrales de temperatura y niveles de riesgo
Los umbrales de temperatura establecidos son 33 grados centígrados para la provincia de Las Palmas de Gran Canaria, y 34 grados centígrados para la provincia Santa Cruz de Tenerife. El criterio para asignar los niveles de riesgo para la salud para situaciones de exceso temperatura, determinado por el Ministerio de Sanidad, se asienta en un algoritmo de decisión.
En función de ese algoritmo, basado en las temperaturas máximas previstas, el umbral establecido, el número de días de persistencia, que se concreta en un mínimo de tres, y los factores de riesgo de cada territorio, se determina cuatro niveles de riesgo:
◦ El nivel 0 (verde), de ausencia de riesgo.
◦ El nivel 1 (amarillo), de bajo riesgo.
◦ El nivel 2 (naranja), de riesgo medio.
◦ El nivel 3 (rojo), de alto riesgo.
La vulnerabilidad a las altas temperaturas incluye factores de riesgo personales, como ser mayor de 65 años, lactantes, gestantes, etc., ambientales, locales y laborales entre otros. Las recomendaciones dirigidas a la población vulnerable especialmente son:
· Permanecer el mayor tiempo posible en lugares frescos, a la sombra o climatizados, y refrescarse cada vez que se necesite.
· Reducir la actividad física y evitar practicar deportes al aire libre en las horas centrales del día.
· Beber agua o líquidos con frecuencia, aunque no se sienta sed y con independencia de la actividad física que se realice.
· Evitar las bebidas con cafeína, alcohol o muy azucaradas, ya que pueden favorecer la deshidratación.
· Prestar especial atención a: bebes, menores, mujeres embarazadas o lactantes, así como personas mayores o con enfermedades que puedan agravarse con el calor (como las enfermedades cardiacas, renales, diabetes, hipertensión, obesidad, cáncer, patologías que dificultan la movilidad, demencia y otras enfermedades mentales, así como el abuso de drogas o alcohol). Aunque cualquier persona puede sufrir un problema relacionado con el calor.
· Usar ropa ligera, holgada y que deje transpirar.
· No dejar a ninguna persona en un vehículo estacionado y cerrado (especialmente a personas menores de edad, mayores o con enfermedades crónicas).
· Consultar a un profesional sanitario ante síntomas que se prolonguen más de una hora y que puedan estar relacionados con las altas temperaturas.
· Ingerir comidas ligeras que ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor (ensaladas, frutas, verduras, zumos, etc.).
· Mantener las medicinas en un lugar fresco; el calor puede alterar su composición y sus efectos.